La tarima flotante es una excelente opción para revestir nuestros suelos debido a su fácil instalación y su atractivo aspecto. Sin embargo, uno de los problemas más frecuentes que podemos encontrarnos con este tipo de suelos es el levantamiento causado por la humedad. Afortunadamente, existen soluciones efectivas que nos permiten reparar la tarima flotante y devolverle su aspecto original. En este artículo, te mostraremos paso a paso cómo reparar una tarima flotante levantada por humedad.
¿Qué causa el levantamiento de la tarima flotante por humedad?
Antes de adentrarnos en el proceso de reparación, es importante entender las causas del levantamiento de la tarima flotante debido a la humedad. La humedad excesiva, ya sea por filtraciones de agua, fugas o subidas del nivel del agua, puede penetrar en los tablones de la tarima y hacer que se hinchen. Esto produce la separación de las juntas y el levantamiento de la tarima.
Es vital abordar este problema rápidamente, ya que si no se toman las medidas adecuadas, se puede producir daño irreversible en el suelo y en la estructura subyacente.
¿Qué necesitarás para reparar la tarima flotante levantada por humedad?
Antes de comenzar con la reparación, es necesario contar con las herramientas y los materiales adecuados. Aquí tienes una lista de lo que necesitarás:
- Sierra de calar
- Martillo
- Taco de madera
- Tornillos
- Taladro
- Cuchilla
- Pegamento para tarima flotante
- Tacos de madera
- Martillo de goma
- Listón de madera
- Mazo de goma
Paso a paso: cómo reparar la tarima flotante levantada por humedad
Paso 1: Inspección del daño
Antes de comenzar a reparar la tarima flotante, es fundamental inspeccionar el área dañada. Observa cuidadosamente los tablones levantados y determina la extensión del daño. Asegúrate de identificar también la causa de la humedad para evitar futuros problemas.
Paso 2: Retirar los tablones dañados
Una vez identificados los tablones afectados, procede a retirarlos cuidadosamente. Utiliza una sierra de calar para cortar justo en la junta del tablón. Realiza un corte limpio y cuidadoso para evitar dañar el resto de la tarima flotante.
Si el levantamiento es solo parcial, puedes optar por utilizar una cuchilla para separar los tablones y abrir espacio para trabajar.
Paso 3: Secado del suelo y subsuelo
Una vez retirados los tablones dañados, es crucial asegurarse de que el suelo y el subsuelo estén completamente secos antes de continuar con la reparación. Utiliza ventiladores, deshumidificadores o incluso calefacción para acelerar el proceso de secado.
Paso 4: Reemplazo y fijación de los tablones
Una vez que el suelo y el subsuelo estén secos, es hora de reemplazar los tablones dañados. Aplica pegamento para tarima flotante en el subsuelo y en la nueva lengüeta del tablón a instalar. Asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante respecto al tiempo de secado.
Coloca el nuevo tablón en su lugar y utiliza tacos y tornillos para fijarlo al subsuelo de manera segura. Utiliza un martillo de goma para asegurarte de que el tablón quede bien ajustado y no se mueva.
Paso 5: Nivelación y sellado
Una vez sustituidos todos los tablones dañados, es hora de nivelar la superficie de la tarima flotante. Utiliza un listón de madera y un mazo de goma para asegurarte de que todos los tablones estén al mismo nivel. Golpea suavemente el listón para emparejar las juntas y que queden perfectamente encajadas.
Por último, utiliza un sellador de calidad para tarima flotante para proteger la superficie y evitar futuros problemas de humedad. Aplica el sellador siguiendo las instrucciones del fabricante y asegúrate de que esté completamente seco antes de utilizar el suelo.
Conclusión
Reparar una tarima flotante levantada por humedad puede parecer un desafío, pero siguiendo estos pasos podrás devolverle su aspecto original y evitar problemas futuros. Recuerda identificar y solucionar la causa de la humedad antes de proceder con la reparación, y utiliza los materiales y herramientas adecuados para obtener resultados duraderos.
No olvides que, en caso de duda o si el daño es extenso, siempre es recomendable contar con el asesoramiento de profesionales en el área. Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de una tarima flotante hermosa y funcional por muchos años.
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